
Esta semana fue ruda. Llevo muchos días trabajando en el proyecto del cual hace parte este blog, y a pesar de mis expectativas no logré terminar la primera fase como estaba previsto. Es que no soy una experta en ciertas artes digitales y a punta de tutoriales y cacharreo la cosa es lenta. Así que el miércoles, al comprobar que tendría que empezar de nuevo, cuando ya ni los zapatos podían devolverme la sonrisa, dejé así, cerré el compu y tomé la desición de ir a la piscina al día siguiente.
Sí, un día entero de sol, agua y vacío mental.

Ayer fue jueves de relax. Fotos en bikini no tengo ;p. Me dormí varias veces bajo el sol, cerca de una piscina demasiado fría para mi gusto caribe, viendo a los alemanitos jugar y comiendo cerezas, ciruelas y duraznos.
A veces se me olvida que es necesario parar, estar sola, dejar que el cuerpo caiga pesado sobre el suelo y ver las nubes.
Hoy me siento muy bien y mi cuerpo me lo agradece. Con energías renovadas empezaré de nuevo y espero pronto poderles anunciar de qué se trata todo esto.
Y para celebrar: me pondré los zapatos otra vez!
A propósito. me los regaló mi suegra y son de Fanática, una tienda bogotana muy interesante en el centro comercial al frente de la Universidad Javeriana.
lineas encantadoras!!!! :=)
ResponderBorrarson tan parecidos a vos!!!!
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